Control de Cladosporium en poscosecha
Entrevista a la Dra. Celia Murciano Camps, productos Citrosol (España)
En diálogo con Citrinotas, la expositora participante en el III Seminario Internacional de Poscosecha, habla de las herramientas de control integral de este hongo que afecta a los cítricos y de las recomendaciones para obtener óptimos resultados con los tratamientos indicados.
¿Cuáles son las principales características de Cladosporium y qué daños puede ocasionar en los cítricos?
Se han descrito varias especies del género Cladosporium capaces de infectar a los cítricos. En el caso concreto de C. ramotenellum, la especie asociada a la mancha negra descrita en mandarinas del Perú, los daños que produce pueden llegar a ser muy evidentes y afectar a grandes zonas de la corteza. La infección comienza en campo, pero es tras el transporte refrigerado cuando se manifiestan los síntomas, una vez que las esporas depositadas en la corteza encuentran zonas debilitadas de la piel (principalmente ocasionadas por daño por frío) y germinan. El podrido por esta especie empieza por manchas negras superficiales y firmes de forma circular en toda la piel de la fruta, sin ningún patrón identificable; posteriormente, un crecimiento micelial negro o gris oliva puede cubrir estas manchas negras. En las primeras campañas, tras su aparición e identificación, C. ramotenellum ocasionó cuantiosos perjuicios económicos para los exportadores de mandarinas de Perú en sus envíos frigoríficos a destinos como Asia o EE. UU., siendo las variedades más susceptibles W. Murcott, Nadorcott y Tango.
¿Cuáles son los principales avances de las investigaciones que realiza Citrosol sobre manejo de Cladosporium, de podrido, en poscosecha de cítricos?
Citrosol está trabajando en el problema de la mancha negra desde su aparición. En un primer momento se realizó un trabajo de investigación muy extenso donde se identificó a nivel molecular la especie causante, su ciclo de infección y se evaluó la eficacia de distintos fungicidas y productos poscosecha para su control. En base a esos estudios se diseñaron tratamientos para aplicar en el almacén y controlar la enfermedad. Desde la campaña 2020 estamos realizando monitorizaciones periódicas de los niveles de Cladosporium spp. en fruta de campo de las distintas zonas citrícolas del Perú, para usarlo como índice predictivo de su posible incidencia en destino. Además, hemos testado y ensayado la eficacia in vivo de nuevas herramientas poscosecha para que el control de este hongo a nivel de packing sea lo más completo posible, actualizando las recomendaciones iniciales de tratamientos poscosecha. Por último, hemos seguido aislando e identificando cepas aisladas de mandarinas afectadas por la mancha negra siempre que se ha detectado su presencia.
¿Qué recomendaciones puede dar a los exportadores citrícolas peruanos respecto a las herramientas en poscosecha para el control de hongos? ¿Qué mejoras se han visto hasta el momento?
Los tratamientos poscosecha propuestos por Citrosol van encaminados a 1) disminuir el inóculo de Cladosporium spp. en la superficie de la fruta de campo, 2) proteger a la corteza de la fruta del daño por frío, y 3) reducir la presencia del hongo en el packing incidiendo en los protocolos de limpieza y desinfección (L+D). Los tratamientos comienzan en el drencher donde, para variedades tardías, recomendamos el uso de imazalil, ortofenilfenol (el fungicida más eficaz frente a C. ramotenellum), Fortisol® Ca Plus (muy efectivo para evitar el daño por frío) y Citrocide® Plus (para mantener el estado higiénico del caldo). A continuación, para reducir aún más la carga superficial del hongo y evitar contaminaciones cruzadas recomendamos el uso el sistema Citrocide® online en la lavadora. Para finalizar, en el encerado recomendamos el uso de la cera Plantseal CI-Control (con alta protección frente al daño por frío) suplementada con imazalil, tiabendazol y ortofenilfenol.
Para complementar los protocolos de L+D habituales en el packing, hemos testado la eficacia del fumígeno a base de ácido sórbico Greenfog®-AS. Este fumígeno es el complemento ideal a los tratamientos propuestos ya que reduce la carga de Cladosporium spp. en la superficie del fruto y en el ambiente y superficies de cámaras y distintas zonas del packing, teniendo la ventaja añadida de que puede usarse en presencia de fruta.
Debe tenerse en cuenta que el control de este hongo debe afrontarse de manera global; aplicar los tratamientos de campo recomendados con la frecuencia indicada, mantener los campos en buen estado, sin presencia excesiva de hojarasca y materia vegetal muerta, aplicar los tratamientos poscosecha validados y recomendados sin excepción, sobre todo en las variedades susceptibles tardías, y mantener el packing en buenas condiciones higiénicas mediante buenos planes de L+D.